Hace poco escuché un pódcast en el que hablaban sobre esta frase, la que a veces usan los padres en situaciones cuando sus hijos tienen problemas como bulimia: “solo lo hace para llamar la atención”. Eve Lindley, la entrevistada, dijo, que nunca entendió esta frase, porque cuando los niños hacen cosas drásticas por atención, por qué no darles la atención. Me pone a pensar, por qué tratamos la atención como un recurso escaso, por qué pensamos qué nuestros hijos, nuestros amigos e incluso nuestros mismos no merecen la atención, qué necesitamos. Leí que pasamos la mayoría del día hacemos cosas automáticamente o habitualmente y solo podemos pensar conscientemente sobre algo por 7 secundas a vez. Eso hace resolver nuestros problemas difíciles. La excepción de eso es cuando hablamos con alguien, en este caso podemos poner atención en una cosa por horas. Pero cuando no tenemos alguien que nos da la atención, que necesitamos nuestros problemas pueden agravarse. Dar atención necesita tiempo y energía. En este mundo capitalista muchas veces no tenemos mucha autonomía en cómo usamos nuestro tiempo y energía, porque pasamos ocho horas al día hacemos lo que nuestro jefe quiere. Cuando estamos por fin en casa, no tenemos energía o ganas para los problemas de otra gente. Miramos esta demanda como una demanda de nuestro jefe y no queremos hacer este trabajo emocional. Porque somos tan cansados y no tuvimos autonomía todo el día, olvidamos que las relaciones a nuestra familia y amigos son las que nos hacen felices. Entonces atención realmente es un recurso escaso, porque necesita tiempo y energía. Pero cuando decimos, que alguien no merece la atención que necesita, lo hacemos porque no entendemos que no es normal, que tenemos que trabajar tanto, que trabajar significa que tenemos que hacer lo que otra persona quiere y que es normal necesitar atención.