- Doctor, mi amigo tiene sífilis.
- Vale, saca a tu amigo y muéstramelo.
1. Algunos rusos quieren irse tan lejos de Rusia como puedan (y no solo por asuntos de seguridad sino por pasión de salir, de colocarse en oposición a todos los demás). Quieren que no haya ningún ruso alrededor. Que nadie sepa que tú eres ruso. Hablar otro idioma. Sumergirse en otra cultura por completo (como en el mar) y volverse lo menos ruso posible. No somos jóvenes, nunca vamos a poder volvernos españoles o franceses, pero podemos volvernos como que ciudadanos del mundo. Perder una que otra cualidad definitiva de los rusos. (Esto sí que pasa, lo queramos o no.)
2. Muchos rusos tienen tantas ganas de alejarse de todo lo ruso que definitivamente muestran haber sido traumatizados.
Así como, por ejemplo, imagina a alguien que ve necesario mostrar a cada ocasión cómo odia a las mujeres y por eso imagina que no tiene nada que ver con ellas, que esta fuera de su poder.
3. Otras personas odian a las personas que odian algo.
Doctor, gracias a Dios, mi amigo no tiene todos estos síntomas, solo el primero. Y puede aceptar sus sentimientos de manera filosófica y reírse de sí mismo como bien sabe que querer "salir de los rusos" es una de las cosas más rusas que hay. Tampoco pasa nada si quiere poder "salir", no todos nuestros deseos podemos controlar.
Entre mis otros amigos, doctor, cada uno tiene su propia manera de defenderse psicológicamente. Creen en ciertas cosas para defender su salud mental y poder seguir funcionando. Y toman esas creencias por una verdad objetiva que tiene que ser aceptada por todos los demás. Pero los demás tienen sus propias defensas psicológicas. Y nos destruimos las defensas el uno al otro.
Yo sé que ningún truco vale para engañar a Hermano Mayor.
(Btw, "товарищ майор" te suena?)