Una de mis cuñadas se casó el tres de junio. Este fue una razón muy importante para nuestro viaje. Queríamos sorprendirla y ella estaba tan feliz de que vinimos que lloró cuando le dijimos. La boda ocurrió en la isla Pag donde mi esposa y su familia pasaban todos los veranos. Bueno, ellos todavía pasan mucho tiempo allá cada verano.

Ya que queríamos sorprendir a todos, tuvimos que alquilar un apartamento sin decirles y esperabamos que alguien nos pudiera llevar a la isla. Al cabo, una amiga que también pasaba muchos veranos en Pag nos llevó. Nos fuimos en la mañana el día de la boda y llegamos a Pag en tres horas y media. Fue el viaje por carro más largo de la vida de Tessa y ella se comportó muy bien.

Al llegar fuimos a nuestro apartamento para vestirnos y después salimos a la casa de los abuelos de Gabriela. Su casa estaba el lugar donde todos se reunimos antes de la boda. Era un momento muy emocionante para los abuelos porque fue su primera vez de ver a Tessa, su bisnieta. Luego los otros invitados empezaron a llegar. La familia de la novia y la famila del novio, la fotógrafa, la maquilladora, el grupo de música.

La boda estuvo en un barco turístico. Nos embarcamos a las cuatro de la tarde y la primera parada fue un faro viejo donde los novios se casaron formalmente y leyeron sus votos matrimoniales. El grupo cantaba durante el viaje al faro y antes de la ceremonia. Era una ceremonia muy bonita y después la fotógrafa saca unas fotos de toda la gente con los esposos. Al regresar al barco empezamos a comer y navegar alrededor de la isla. Luego paramos en una playa donde algunos invitados nadaron. Regresamos a la tierra en las nueve y media, después de más de cinco horas en el barco. Por supuesto, estaba muy divertido y bonito pero también estaba demasiado para Tessa y al final ella tuvo sueño y estaba malhumorada.

Nos quedamos en Pag una día y media después de la boda. Fue mi primera vez en la costa de Croacia desde hace seis años y me dio cuenta que la extrañaba mucho. Pasamos buen tiempo con los abuelos de Gabriela y la amiga que nos llevó a Pag pero era un viaje tan corto. Por suerte, planeamos mudarse a Suiza el año que viene y quiero que vayamos al Adriático cada año.