#9
La mayoría de la comida en los Estados Unidos sirve para dos fines: practicidad y estatus. Por un lado hay los burritos congelados y las hamburguesas que no teinen ni un rastro de carne real, y por el otro hay restaurantes pudientes que ningunear lo demás mientras cobran cien dólares por un plato pequeñito.
Es decir, que nuestra cultura acerca de comida consiste en dos acciones principales: ahorrar dinero o jactearse. Es muy infrecuente que la comida se basa en amor.
Además, hay una gran brecha de conocimiento con respecto a de dónde viene nuestra comida. Todo está empaquetado bajo capas y capas de plástico. Puede que los ingredientes en tu almuerzo hayan venido de diez lugares diferentes, en vez del granjero o carnicero local.
Tengo muchísima envidia de las personas que viven en países con una cultura que vale más la comida. Comer es una gran alegría de la vida, y creo verdaderamente que en mi país estamos desaprovechando en una oportunidad diaria para gozar en lo que comemos.
