Cuando hago la sopa de la semana, siempre está el problema de enfriarla. Cinco litros de líquido casi hirviendo abrumarían nuestra pequeña nevera. Cuando añado espinacas a la sopa al final, todavía hay un fregadero lleno de agua fría en la que la he lavado, y eso funciona bien: simplemente coloco los cinco contendores de sopa en el fregadero y déjalos enfriar un poco. Pero esta mañana me olvidé y dejé escurrir el agua. ¿Cómo enfriar la sopa? Finalmente me di cuenta de que era enero, y en una mañana de enero, incluso en Oregon, hace un frío razonable afuera, y podía dejar los contenedores en el porche. En realidad, la temperatura es, inusualmente, la de una nevera en este momento: menos de 4 grados. No suele ser tan fresco aquí. Pero todavía me pareció cómico que yo, ocupando una pequeña burbuja calentada en un enorme mar de aire fresco, no pudiera pensar de inmediato en cómo enfriar mi sopa. Es obvio. Deja que el mundo ambiental se ocupe de ello, Dale.